Consolidación de las ‘capillas góticas’ de la Iglesia de San Martín de Tours, en el pueblo viejo de Belchite (Zaragoza)
La
iglesia de San Martín de Tours se ubica en el extremo Sur del pueblo
viejo de Belchite, en la plaza de la iglesia del mismo nombre y junto al
convento de San Rafael. Se levanta sobre una plataforma horizontal a
unos 2,5 metros sobre el nivel de la calle Enrique Naval y enmarca el
fondo de perspectiva desde la calle de la iglesia, lo que acrecenta su
monumentalidad.
La iglesia de San Martín de Tours en Belchite viejo fue construida como una iglesia mudéjar de ladrillo en las primeras décadas del siglo XV, aunque con posterioridad, entre 1550 y 1560,
sufrió algunas reformas. Entre éstas destacaron la elevación de la
nave, la construcción de una galería superior, el cegamiento de algunos
vanos y la apertura de otros nuevos, así como la decoración exterior del
ábside. Además en el siglo XVIII se amplió la nave con un tramo más a
los pies, se modificaron algunas capillas laterales y se construyó la
portada monumental.
En la actualidad se encuentra en estado de ruina debido a los efectos de la Guerra Civil Española durante la Batalla de Belchite
y al estado total de expolio y abandono al que se ha visto sometida
durante al menos siete décadas posteriores. Tanto la iglesia como la
torre tienen un basamento de piedra sillar, aunque el resto de la
construcción está realizada en ladrillo. Originalmente se trataba de una
iglesia gótico-mudéjar con ábside poligonal y nave única cubierta con
bóvedas de crucería, sometida a las citadas ampliaciones y reformas. La
torre, adosada al lado meridional de la iglesia, tiene planta cuadrada y
estructura de alminar almohade con machón central.
De
la transformación que sufrió en el siglo XVI se conservan las dos
capillas cubiertas con bóveda de crucería que han sido objeto de este
proyecto de consolidación estructural. Estas dos capillas, que se han
denominado en varios documentos como ‘capillas góticas’, se encontraban
en julio de 2017 en un estado de ruina alarmante, con un peligro
evidente para los visitantes que realizan visitas guiadas al recinto del
pueblo viejo de Belchite, y por su contrastado valor, la Dirección
General de Cultura y Patrimonio del Gobierno de Aragón decidió acometer
una intervención de urgencia para llevar a cabo una consolidación
efectiva de estas construcciones.
El
proyecto de consolidación se basa en el principio de la conservación de
lo existente, con el objetivo de garantizar la seguridad para que este
monumento sea posible ser visitado de forma guiada.
Se
propone realizar una actuación de urgencia, que trata de conservar las
bóvedas en su situación actual, y frenar la caída de objetos y el
incremento de los agujeros de las bóvedas, así como frenar la humedad en
los costados.
Es
criterio manifestado en el encargo del trabajo dejar los estigmas de la
guerra, actuando simplemente allá donde está comprometida la
estabilidad de sus fábricas. Como norma general, se mantendrán además,
todos los restos superficiales existentes (estucos, pinturas...) de
forma que pueda tenerse una lectura cronológica de la historia del
edificio y de su construcción a través de las diferentes capas
encontradas.
El
Plan Director del pueblo viejo de Belchite y de la Iglesia de San
Martín de Tours (BAU Estudio de Arquitectura y Urbanismo SLP, 2010)
plantea que en la intervención en las bóvedas se atienda al tipo de
rotura que tenga la cubierta: “Si la rotura es fruto de un impacto de
obús, se dejará abierto y si es debido al colapso por abandono, el
encamisamiento será continuo.”
Actuación realizada
La
intervención ha tenido dos fases diferenciadas. En la primera, se han
realizado los trabajos de consolidación de las bóvedas desde el
extradós (nivel cubierta), y en la segunda se ha procedido a la
reparación de los techos de las bóvedas desde la nave (intradós de las
bóvedas).
En
primer lugar, se procedió a la instalación de una plataforma-andamio
que ocupaba la totalidad de la superficie de intervención (unos 153,52
metros cuadrados) que posibilitó la instalación de apeos de los nervios
de las bóvedas (en la segunda Fase, esta plataforma permitió la
reparación puntual de los elementos que han sido consolidados).
Asimismo, se procedió al apeo de los arcos perimetrales de las bóvedas
de las dos capillas.
El
trabajo de consolidación de las dos bóvedas se realizó trabajando desde
la parte de la cubierta, para consolidar la estructura general, y
evitar derrumbes que podrían suceder si no procede previamente a la
consolidación estructural.
Un
andamio permitió el acceso a la cubierta, y se instaló una plataforma
central que permitió los movimientos de los operarios durante la obra.
Se
procedió a la retirada manual de las piezas cerámicas que formaban
parte de la cubierta original, acopiando adecuadamente aquellas piezas
que podían ser objeto de recuperación posterior. Con seguimiento
arqueológico, se procedió a la retirada de la vegetación, los escombros y
los materiales depositados en la esquinas de las bóvedas y espacios
perimetrales. Una vez retirados los elementos sueltos se comprobó que en
algunos tramos la segunda capa estructural de ladrillos estaba
totalmente suelta, de manera que en algunos espacios únicamente estaba
trabajando la primera capa, y en algunos puntos, en los que se había
desprendido la primera capa, incluso únicamente resistía la capa de
mortero dispuesta inicialmente entre las dos capas de ladrillo.
Se
procedió a la reparación de la primera capa, y a la reconstrucción de
la segunda capa de ladrillos. A continuación se procedió al extendido de
una capa de refuerzo estructural mediante la aplicación de mortero
bicomponente compuesto por cal hidráulica natural, puzolanas, áridos
seleccionados y otros aditivos, con un acabado fratasado, reforzado con
malla de fibra de vidrio antiálcalis.
Los
boquetes existentes en las bóvedas se han conservado, asegurando desde
la parte superior la estabilidad de los ladrillos dispuestos en el
perímetro de estos huecos.
Mediante
una adecuada nivelación con mortero aligerado de arlita, se han
replanteado los niveles en el perímetro para garantizar la evacuación de
agua hacia el exterior del edificio por medio de dos nuevas gárgolas de
ladrillo de sencilla factura.
En
el trabajo de reparación de las bóvedas desde la cara inferior se han
reparado todos los elementos identificados en el proyecto (reparación de
grietas en nervios de las bóvedas, reparación de los elementos de la
plementería que se encontraban desprendidos o abombados con riesgo de
desprendimiento, etc.)
Superficie e importe económico de la intervención
Los
trabajos de consolidación estructural fueron adjudicados por la
Dirección General de Cultura y Patrimonio del Gobierno de Aragón a
CONSTRUCCIONES Y EXCAVACIONES LECHA S.L. El proyecto de consolidación
estructural ha sido redactado por CEROUNO ARQUITECTOS, y en la dirección
facultativa de las obras, además de los arquitectos de CEROUNO
ARQUITECTOS ha sido desarrollada por los arquitectos Sergio Latre y
Javier Corzán.
Se
ha intervenido en una superficie de 76,76 metros cuadrados (en la parte
del intradós y en el extradós), es decir, una intervención en una
superficie total de 153,52 metros cuadrados. El importe de las obras
contempladas en el proyecto asciende a 49.416,84 euros (IVA no
incluido).