OBRA: 2012 | RESTAURACIÓN CASTILLO

Una azarosa trayectoria bélica explica que los restos del castillo medieval que han llegado hasta nuestros días sean realmente escasos, y en alguna medida alterados por la adición de volúmenes posteriores, como la del antiguo edificio de los juzgados, que se construye adosado al extremo norte y noroeste del Torreón.

La imagen previa a la restauración del castillo, organizado en una serie de bancadas escalonadas hacia el cortado del río Guadalope, corresponde principalmente con el resultado de una intervención llevada a cabo en los años setenta. Los restos que nos encontramos consisten fundamentalmente en un espacio central derruido, que corresponde con el Salón del Compromiso, el cual queda flanqueado por dos torreones: en el extremo norte, el Torreón principal, de planta cuadrangular, incompleto en altura, conserva en su interior dos arcos apuntados en regular estado; y en el extremo sur, un torreón circular de reciente factura.

Del Salón, sin paredes, sin techo ni cubierta, y con el terreno natural e irregular como suelo, sólo queda como reconocible una jamba y un arranque de dintel de una de las ventanas con las que contaba el Salón en su fachada hacia la Colegiata, según algunos de los grabados existentes.

Por último, se mantiene el basamento tanto del Salón como del Torreón principal, consistente en una escarpa, talud o alambor, y que parcialmente queda oculto por el edificio que albergaba los antiguos juzgados.

Proyecto y obra

Son tres las zonas principales en las que se centra la intervención: el volumen de acceso, el Salón del Compromiso y el Torreón.

Para facilitar el acceso al castillo se proyecta un nuevo volumen que se adosa al edificio de viviendas lindante con el conjunto por su extremo sur. En este nuevo cuerpo se disponen una escalera y un ascensor que garantizan una completa accesibilidad desde la cota inferior al Salón del Compromiso, situado aproximadamente siete metros por encima de la base del castillo. Este nuevo volumen se desarrolla en tres niveles diferentes que denominamos inferior, medio y superior.

Desde el nivel inferior, se accede directamente al ascensor a través de un antiguo arco adintelado con escudos -y que los arqueólogos han recomendado conservar en su más que probable ubicación original- a un tramo de escalera exterior que enlaza con el rellano de una escalinata-rampa de piedra recientemente descubierta. Desde este nivel intermedio se accede, ya por el interior del nuevo volumen, al nivel superior, el del Salón del Compromiso y el Torreón.

El Salón del Compromiso se nos presenta falto tanto de paramentos exteriores, como de suelo transitable y cubierta. Para acondicionar este espacio, se proyecta un volumen, delimitado por una densa trama de vigas de madera que luego se prolongan verticalmente por las fachadas. Esta seriación es el leitmotiv del proyecto y se extiende a las defensas metálicas y al propio hormigón blanco, que se funde con los restos existentes, con una acusada textura vertical dejada por el encofrado de tablas de madera. Además, las excavaciones arqueológicas han sacado a la luz una cisterna de época romana emplazada junto al torreón circular, y que ha quedado incorporada al interior del Salón.

Con respecto al Torreón, el proyecto recompone por su parte exterior parte del volumen en altura que ha perdido, con muros de hormigón que continúan los paramentos existentes de tapial y otros materiales. En su interior, se han restaurado dos arcos apuntados que se encontraban deteriorados en sus claves y semiocultos por distintas tabiquerías antiguas. Se construye un forjado intermedio, realizado con estructura de madera y situado por encima de los arcos, manteniendo los salientes de piedra que pudieron servir de apoyo a un forjado antiguo totalmente desaparecido.

Las cubiertas se recubren con bandejas de zinc. En los muros, se han eliminado los morteros de cemento en juntas, recubrimientos y recrecidos de antiguas intervenciones para realizar un rejuntado con mortero de cal ligeramente coloreado con pigmentos o tierras naturales con junta enrasada. Los lienzos de piedra que precisan su reconstrucción o reposición, son reparados con mampuesto y sillares de piedra arenisca similar a la empleada en el castillo.

Ficha técnica

Promotor: Gobierno de Aragón.

Proyecto y Dirección de Obra: Cerouno Arquitectos (Alfaro-De la Cal- Labarta-Oliván)

Dirección de Ejecución: Javier Ángel-Alberola Aspiroz

Contratista: TRAGSA

Colaborador en estructuras: Ateco, s.l.

Fechas: Proyecto: 2011 | Construcción: 2012 |

Superfícies: útil: 429,69 m2

Fotografías: Cerouno Arquitectos | Juan Carlos Gil Ballano